TEOFILO GARCIA, Ms.
"Gané las elecciones internas del partido, soy candidato oficial a…….". Con frases como esas muchos participantes de la política en los diferentes partidos, salen a celebrar y levantar el pecho por ese avance a la lucha por una posición pública en los próximos torneos electorales.
Antes de iniciar con este escrito, me permito definir el término candidato: La palabra candidato proviene del latín, Candidatus y según la Real Academia Española de la Lengua:
"Es una persona que pretende alguna dignidad, honor o cargo, o es propuesta para ello".
"Persona que aspira en política a ser elegida para un determinado cargo''.
Ante esta definición también queremos citar lo consagrado en la Constitución de la República Dominicana en su artículo 22, numeral "1) Elegir y ser elegibles a los Cargos que establece la presente Constitución".
A todo esto muy cierto, cada individuo tiene aspiraciones y derecho hacerlo, sin embargo, ¿Están preparados para estas aspiraciones?
Muchas personas cercanas a mí, conocen y saben que estoy ausente de la participación directa en ninguna organización política desde hace unos años, que hemos realizado trabajos profesionales de forma independiente y sin ninguna filiación partidaria.
Aclarado ese punto, hace unos meses, realicé una publicación en mis redes refiriéndome a que para poder aspirar se necesita NÚMEROS, que es igual a VOTOS y DINERO. Ese post en Facebook generó una sola avalancha de gente que no logró comprender el sentido de análisis al que nos lleva la frase.
Paradójicamente el pasado proceso de primarias simultáneas realizado en el país, dejó diferentes sabores en el paladar de muchos de los aspirantes a candidatos que participaron en la contienda, y una vez más quedó evidenciado que para ser Candidato se necesitan NÚMEROS. Sí, repito, Números!, Pues si bien es cierto que salieron airosos del proceso, aún con cifras tan bajas dentro del escrutinio, la verdad es que los números no fueron como muchos argumentaban tenían y arrollaban.
Los resultados están ahí. Y SON CANDIDATOS.
Pero, ¿Y ahora que lo son? ¿Cuál es el próximo paso y plan a ejecutar?, y lo pregunto pues para nadie es un secreto que fueron muchas las sorpresas en dicho proceso, pero aún más, siguen las emociones en los demás partidos que no utilizaron el método de primarias simultáneas, pero que ya han escogido de alguna forma los candidatos a participar en el torneo electoral del 2020, muchos con rechazo, y otros con cierta aceptación.
¿Cuentan con los NÚMEROS, O simplemente ya queda satisfecho el ego de querer ser candidato aún con las deficiencias que en ocasiones arropan a muchos de estos ciudadanos que desean ocupar una posición pública con el favor del voto popular?.
Al final, hago esta preguntas debido a que en ocasiones y en muchos procesos pude observar, cómo aspirantes y candidatos decían, "Tengo X cantidad de comités afectivos, eso equivale a X cantidad de votos", también escuché, "en el barrio tal, tenemos a Juan, en el barrio tal a José, etc., etc.," Cuando muchas veces solo esto se queda en el papel.
En algún momento comentaba con unos amigos, que en política se debe tener olfato para poder oler lo que se cocina en los círculos internos de los partidos, pues esto permite tomar mejores decisiones en cuanto a las posturas que en el diario devenir de la vida partidaria, suelen afectar a quienes participan en los procesos, en ese sentido, se debe andar con un paso adelante y con madurez para poder asumir ciertas posiciones de la cúpula de los partidos políticos.
La política va más allá de simpatías, la política es servir, es hacer, llevar soluciones, organizar, la política es participación, eso es la política, y créanme que dada la coyuntura actual, con acuerdos formalizados, acuerdos soterrados, influencia del sector privado, incidencia de los medios (convencionales y no convencionales), en fin, hay mucho que observar, analizar y plasmar.
Por el momento, concluyo expresando que son muchos los que aspiran a ser candidatos y pocos los que realmente cumplen el rol para serlo.
TEOFILO GARCIA, Ms.
El autor es mercadólogo, catedrático universitario, asesor político.
Ha dirigido campañas e investigaciones políticas exitosas.
teofilogm@aol.com
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