Entrando el 2021, la República Dominicana tiene cifradas todas sus esperanzas y expectativas en el resurgimiento de lo que ha sido su principal soporte y generador de divisas: el Turismo.
De ahí que el presidente Luis Abinader y el ministro de Turismo, David Collado, hayan conformado una poderosa alianza estratégica con entidades el sector privado para impulsar cuantas gestiones e iniciativas sean necesarias para potencial a este importante sector.
Las medidas que como arma el gobierno dominicano define para revertir los efectos de la pandemia por la Covid-19 y el futuro del turismo, son tal vez las más seguidas por la población, debido a su influencia en la sociedad y en el desarrollo del país.
Para la Republica Dominicana es importante la industria sin chimeneas, al representar de manera directa, indirecta e inducida más del 20% del Producto Interno Bruto, y a su alrededor se mueve todo un sistema de apoyo logístico, sin obviar la cantidad de empleos directos e indirectos que genera.
También resulta que su apertura y desarrollo traen aparejados riesgos de propagación de la nueva cepa de coronavirus, y no pocos temores entre turistas y receptores.
El gobierno dominicano apostó por sacar adelante a la actividad y presentó a la nación el 25 de agosto, el Plan de Recuperación Responsable del Turismo ante la Covid-19, toda una estrategia que incluye una inversión de 420 millones de pesos (siete millones de dólares) en promoción.
Este plan que se aplica desde septiembre pasado y consta de acuerdos con aerolíneas, apoyo económico, flexibilización fiscal, medidas monetarias, fondo de garantías, créditos y la creación de un seguro de salud para turistas, los cuales puedan ser afectados por la Covid-19.
Todo esto representa un primer abordaje a las necesidades inmediatas del sector, que deben ser monitoreadas constantemente para medir el impacto y la efectividad de cada iniciativa, para hacer los ajustes que sean necesarios.
Se augura éxito a esta estrategia, sustentada en cuatro ejes fundamentales -gobernanza, gestión del riesgo sanitario, comunicación y apoyo económico-, engranada de forma conjunta y coordinada para lograr la normalidad en el sector y que este salga más fortalecido, en mejores condiciones una vez pasada la pandemia.
Ahora deben llegar las demás iniciativas anunciadas, especialmente la eliminación de los pagos de anticipo por seis meses y el del uno por ciento de los activos hasta junio de este año.
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