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| Karl-Anthony Towns (32), de Minnesota, lleva el balón ante la presión de Immanuel Quickley (5) y Taj Gibson (67), de los Knicks durante el partido de la NBA. |
La mujer dominicana falleció en abril de 2020, por complicaciones relacionadas con el COVID-19. Pero Karl-Anthony Towns estuvo en la cancha, y fue observado desde el graderío por su padre, hermana y otros familiares y amigos.
Towns les dio otro gran recuerdo. De paso, dio también un triunfo a Minnesota.
Convirtió una jugada de tres puntos que significó la ventaja con 29 segundos por jugar y los Timberwolves superaron 112-110 a los Knicks el martes.
Towns, quien creció en el cercano estado de Nueva Jersey, miró hacia arriba antes de realizar su primer tiro libre. Fue una forma de recordar a su madre.
Su última visita a la línea de castigo terminó resolviendo el duelo.
“Le dije a mi papá que todos iban a tener su oportunidad de vivir un buen momento en el Madison Square Garden. Creo que esta noche fue para mí. Fue el momento más grande que he tenido en el Garden”, relató Towns. “Un gran público, ambiente y energía. Y pude silenciarlos a todos, así que eso se siente todavía mejor”.
Los Knicks contaron con un gran encuentro de Kemba Walker en su regreso tras nueve partidos de ausencia con una molestia en la rodilla izquierda, y mantuvieron la ventaja durante la mayor parte del cuarto periodo.
Pero los Timberwolves reaccionaron y aguantaron cuando Alec Burks falló un tiro de tres que le hubiera dado el triunfo a Nueva York.
Anthony Edwards anotó 21 puntos y Towns añadió 20 para los Wolves, que ganaron por sexta vez en ocho duelos para igualar su marca en 22-22. D’Angelo Russell añadió 17 unidades.
Evan Fournier consiguió 27 puntos y Julius Randle sumó 21 para los Knicks, que perdieron por segundo día seguido y cayeron por debajo de .500 al poner su récord 22-23. Walker anotó 17 de sus 19 puntos en la segunda mitad.
Los Knicks estaban protegiendo una ventaja de un punto cuando Walker acertó triples con 5:27 y 4:36 por jugar. Su tercero seguido puso el marcador 107-102 con 3:41 por jugar.
Pero los Wolves no permitieron otra canasta y tuvieron el balón en una posesión clave después de que la repetición instantánea decretara que el balón había salido del campo con 48 segundos. Towns hizo un movimiento decisivo y anotó mientras recibía una falta de Randle, para poner el encuentro 111-109.
Randle recibió una falta del otro lado, pero solo metió un tiro libre, dejando a Minnesota con ventaja por uno. Patrick Beverley acertó un tiro desde la línea con 19 segundos para completar el marcador.
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