José Gómez Cerda.
Hoy día, en todas partes del mundo, andamos con un teléfono inteligente, móvil, o celular, en especial los jóvenes, que conocen todas las posibilidades que tienen esos medios de comunicación. De la misma forma que todos las usamos, así también sucede en los países en conflictos, cuando un joven se ve limitado en el uso de las redes sociales, le falta algo en su vida cotidiana.
Las redes sociales son estructuras formadas en Internet por personas u organizaciones que se conectan a partir de intereses o valores comunes. A través de ellas, se crean relaciones entre individuos o asociaciones, de forma rápida, sin jerarquía o límites físicos.
Las grandes tecnológicas de las redes sociales actuales se han posicionado contra Putin. Y los medios de comunicación están limitados actualmente en Rusia, por bloqueo estudiado, sin improvisaciones.
Mientras Ucrania, está militarmente ocupada y atacada, todos los ucranianos disfrutan de las redes sociales, y hasta desde un sótano, se pueden comunicar dentro de su país, y en especial fuera de Ucrania.
Los horrores de la guerra; las muertes, asesinatos, heridos, prisioneros, bombardeos, separación de familias, y otras atrocidades, no pueden ser impedidas por las redes sociales.
Elon Musk, el dueño de la empresa Tesla, ha respondido a la movilización de las tecnologías, para posicionarse contra la invasión. Ucrania le pidió ayuda y Musk respondió, activando su Internet por satélite Starlink en todo el país invadido, y los ucranianos disfrutan de internet, no importa donde estén, y gratis.
YouTube, Twitter, Meta y una larga lista de empresas, de tecnología, para las redes sociales, han bloqueado sus actividades en Rusia. Apple también se unió al bloqueo de Rusia para el funcionamiento de sus redes sociales.
También se ha deshabilitado el tráfico virtual de Apple Maps en Ucrania, los satélites con inteligencia artificial que conocen los mapas, carreteras y tráficos, como medida de seguridad y precaución para los ciudadanos ucranianos
Hasta la plataforma de streaming Netflix se ha negado a transmitir canales de televisión estatales rusos en ese país, cancelando sus próximos estrenos en territorio ruso. Y Telegram también ha suspendido sus actividades en Rusia.
Los periódicos digitales, podcast y otros medios de comunicaciones sociales, llegan a los ucranianos, los pueden leer, y escuchar en sus teléfonos inteligentes.
Gracias a las redes sociales el presidente de Ucrania, se ha podido comunicar en vivo, hasta desde su sede presidencial, con diversos grupos internos, y con el exterior, entre ellos con la Cámara de los Comunes, de Inglaterra, con el Consejo de la Unión Europea, diversos presidentes de países europeos, con judíos residentes en Estados Unidos, y ha dado varias ruedas de prensa, en vivo y directo.
Hoy día, los rusos que tienen todo el poder militar, que pueden ocupar un país como Ucrania, en cuestiones de horas, se ha encontrado contra una arma silenciosa, que son las redes sociales, y sus pasos son muy lentos, mientras la población indefensa (mujeres y niños), salen por millones fuera del país, y los hombres resisten. Las redes sociales están de parte del pueblo de Ucrania, contra los invasores.
Es muy seguro, que los jóvenes y gran parte de la población rusa está notando que algo no funciona, sólo con las armas, en la invasión a Ucrania, y están tomando conciencia del daño que está cometiendo el presidente Putín, contra el pueblo de Ucrania, y que la falta de las redes sociales, les perjudica, hasta en su vida cotidiana.
Las redes sociales, que no existían en las guerras anteriores, están demostrando que son armas de combate, eficaces, informativas, y que están acompañando al valeroso pueblo de Ucrania.
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